Colomera se encuentra entre Sicilia y Túnez
17 de julio de 2020
La tortuga, curada en el ARCA del Mar del Oceanogràfic, partió el 25 de junio de la playa de Bellver de Oropesa y ya ha recorrido más de mil kilómetro.
Según los datos de buceo, que envía al satélite, se desplaza la mayor parte del tiempo a 100 metros de profundidad con registros de hasta 270 metros.
La tortuga “Colomera” de 100 kilos de peso, que soltaron la Fundación Azul Marino y Fundación Oceanogràfic el pasado día 25 de junio en la playa de Bellver de Oropesa, ha recorrido ya más de 1.000 kilómetros, la mayor parte del tiempo por debajo de los cien metros, si bien se han registrado inmersiones notables de hasta 270 metros de profundidad.
En su día número 22 de viaje, la tortuga que fue curada en el ARCA del Mar del Oceanogràfic, se encuentra en el Estrecho de Sicilia, entre las costas de Túnez y la de Sicilia, según los datos que está enviando regularmente y sin problemas hasta ahora el transmisor satelital, que le fue colocado antes de soltarla en la playa.
De acuerdo con todos los parámetros recogidos el comportamiento de Colomera es aparentemente normal. Se desplaza a una velocidad media de 2,2 km/h, está sana y está llevando a cabo su larga ruta migratoria sin ninguna incidencia.
Un animal excepcional
Colomera entró al mar en la Playa de Bellver a las 12:30 del pasado día 25 de junio y comenzó a nadar con gran vigor y en una dirección inequívoca hacia las Islas Baleares, pasando previamente por las Islas Columbretes.
Es una hembra de unas dimensiones y peso extraordinarios y está clasificada como la más grande de cuantas se han curado en el ARCA del Mar del Oceanogràfic en todos sus años de existencia.
Se trata de un ejemplar que ha sido capturado accidentalmente en dos ocasiones por pesca de arrastre y en las dos ha pasado por el AÁrea de Recuperación y Conservación de Animales del Mar (ARCA del Mar) de la Fundación Oceanogràfic, gracias al aviso al 112 de los pescadores, activando así la Red de Varamientos de la Comunitat Valenciana.
Seguimiento de la trayectoria por satélite
La tortuga lleva instalados unas marcas metálicas identificativas y un microchip con los que, en caso de ser capturada de nuevo o contactar con alguna institución, se podrá conocer su identidad y las referencias de su estancia en la Fundación Oceanográfic.
Además, y de una forma especial, se le ha colocado en su caparazón un sistema de seguimiento satélite, gracias al cual se está haciendo un seguimiento constante de su singladura por el mar y reporta valiosa información sobre aspectos importantes para la conservación de esta especie como su demografía, movimientos o las amenazas globales que la afectan.